Pero si escribir nos hace ser capaces de compartir abiertamente el dolor, la rabia, la ilusión, el amor y tantos otros sentimientos, ya habrá merecido la pena hacerlo mi querida María.
Ese "poco más" deja claro que es mucho, igual que tu poema que en tan pocos versos dice todo.
María, me quedo con ese reto de mirarnos por dentro, escudriñando nuestros rincones para ver lo poco que somos, y demostrarnos a nosotros mismos la tarea que nos queda para averiguar de dónde venimos y reconocer la luz y el camino que transitamos.
Y poco más ¿te parece poco lo que dices?. Me ha encantado el poema, Maria (mucho).
ResponderEliminarUn beso
Una delicia leerte y más escucharte, María.
ResponderEliminarUn abrazo
así son las cosas, querida Maria. Pero creo que tampoco buscamos más. escribir es como respirar y, para eso, no hay que pedir permiso.
ResponderEliminarUn beso.
Pero si escribir nos hace ser capaces de compartir abiertamente el dolor, la rabia, la ilusión, el amor y tantos otros sentimientos, ya habrá merecido la pena hacerlo mi querida María.
ResponderEliminarEse "poco más" deja claro que es mucho, igual que tu poema que en tan pocos versos dice todo.
Me ha gustado mucho corazón.
Un beso
“cerrar alguna herida,
ResponderEliminarsaber de dónde vienes,
reconocer la luz...”
Nada más, y nada menos. Observar la vida y reconocerla, reflexionar y provocar la reflexión de otros...¿te parece poco?
Me gusta mucho, Maria, adelante.
Besos y un fuerte abrazo.
María, me quedo con ese reto de mirarnos por dentro, escudriñando nuestros rincones para ver lo poco que somos, y demostrarnos a nosotros mismos la tarea que nos queda para averiguar de dónde venimos y reconocer la luz y el camino que transitamos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Alejandro
No hay nada mejor que un buen título y mejor poema con que alimentar el alma en una mañana de frío y sin café.
ResponderEliminarMuitas graciñas, linda.
Nelken