ENCIMA DE LA MESA
Todo el amor
que me diera mi madre
encima de la mesa,
el patio del colegio,
su bullicio,
el terrible silencio de mis ojos,
es imagen
ahora
para decir.
Con los pliegues de mi falda
y el algodón de azúcar
escribo algo sencillo:
el despertar de todo,
mirada de cíclope,
el aleteo del mirlo,
el recorrido pertinaz de esta sangre antigua.
Es una joyita con cierre de oro.
ResponderEliminarBesos.
Maria las cosas sencillas... son la mayoria de veces las mas hermosas, los sentimientos hacia una madre prevalecen en el alma de tod@s.
ResponderEliminarUn abrazo Pilar Contreras
Sigue escribiendo con esa sencillez, esa sangre antigua... Mil besos.
ResponderEliminarSiempre es una gozada leerte, un lujazo.
ResponderEliminarPrecioso y preciso, elegante, magnífico.
Un abrazo grande.